Los problemas de conducta no deben ser ignorados. Estos problemas muy pocas veces desaparecen por si solos y casi siempre tienden a empeorar. ¡No esperes! Muchas veces el tratamiento de un problema de conducta, diagnosticado a tiempo, sería sencillo de resolver, pero desgraciadamente cuando los dueños deciden ponerse en manos del especialista, es demasiado tarde y el comportamiento está muy arraigado, haciendo más difícil su recuperación.
Educar a nuestras mascotas no es complicado. Requiere ciertas dosis de paciencia, tiempo y dedicación. El secreto está en aplicar las técnicas del aprendizaje animal y aprender las bases del lenguaje canino. Dueños y perros aprenden más fácilmente si existe una buena comunicación entre ellos, con juegos, deportes y disfrutando de su compañía mutua divirtiéndose.
Finalmente tenemos que tener claro que nuestra responsabilidad al adquirir una mascota es asegurarnos que tiene el suficiente estímulo físico y mental para desarrollarse saludablemente. Con ello conseguiremos que llegue a ser ese amigo y compañero fiel que tanto deseábamos.
miércoles, 24 de marzo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario